“Fidel era un futbolista de calidad regular. Pero era corpulento, musculoso, un jugador muy fuerte y, sobre todo, muy bravo. Ocasionalmente jugaba. No era un jugador titular en el equipo, pero le gustaba el fútbol”, dijo al diario El País Armando Montes de Oca Arce, quien fuera compañero de Fidel en ese equipo.
Ya en el poder se le observó principalmente jugando béisbol o básquetbol. Un decreto firmado en 1961 hizo que el deporte fuera obligatorio en los colegios y así lo convirtió en una de las banderas de la revolución. Su iniciativa permitió desarrollar talentos que convirtieron a la isla en constante protagonista de las competencias internacionales. Hasta hoy y desde 1954, Cuba suma 77 medallas de oro en Juegos Olímpicos, 65 de plata y 71 de bronce.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.