Al Bat
Stengel, notable estratega
Por Jesús Alberto Rubio.
Como resultado del tema de las anécdotas y esas cosas que
ayer compartimos en Al Bat, más que pronto me pidió mi
querido compadre y hermano, el licenciado Francisco
Martínez Martínez, que si cuando iba a recordar a Casey
Stengel.
Para luego es tarde, rápido le contesté, pensando en la
dimensión que significa Stengel en la historia del
pasatiempo.
No necesito recordarle que, al paso del tiempo, persiste la
viva memoria, leyendas y anécdotas de tan
grande personaje,
quien también trascendió por pintoresco y la adoración que
se le tuvo en su paso por el béisbol de Ligas Mayores.
Pero, sobre todo, por ser el máximo mánager ganador de
Series Mundiales con los NYY… y eso como que lo dice
todo.
Su recuerdo, eterno, en el acontecer del máximo equipo
ganador (27) de series mundiales otoñales.
Ahí están los registros:
En la década de los años 50´s fue algo fuera de este mundo.
En un período de diez años, Nueva York fue campeón
mundial en siete ocasiones teniéndolo de estratega.
De hecho, los NYY apantallaron al mundo con títulos
mundiales de 1949 a 1953, algo nunca visto y aún difícil de
igualar.
Con NY logró 10 campeonatos de Liga y 7 series mundiales,
con cinco de ellas, repito, de forma seguida, algo que ningún
otro manager ha podido lograr en las Grandes Ligas.
Stengel, como Ruth, Gehrig, DiMaggio, Berra, Ford, Mantle
y demás héroes/iconos de Manhattan y el Bronx, inspiran y
evocan al triunfo con su espíritu eterno por dentro del
histórico Yankee Stadium.
Iba por otro
En 1954 iba por su sexto título consecutivo en la Americana,
pero ese año los Indios de Cleveland ganarían 111 juegos e
irían al clásico otoñal como grandes favoritos, sólo que... esa
historia usted la sabe más que nadie: Gigantes de NY los
aplastaría en cuatro en fila... india.
En el 55 se desquitó:
Llegó de nuevo a la Serie de Octubre ante Brooklyn, pero
cayó en el séptimo decisivo 2-0 en aquel histórico juego de
la atrapada, inolvidable, de Sandy Amorós. Sería el primer
clásico otoñal ganado por los Dodgers, que entonces tenían
su casa en Nueva York.
Y con Larsen…
En el 56 tuvo otro gran momento de gloria. Y quizá el mayor
triunfo de su carrera:
Era el quinto partido, de nuevo ante Dodgers y la serie estaba
empatada a 2. No había decidido a quien subir a la loma y ya
de último momento se inclinó por... Don Larsen.
¡Sabia decisión!
Larsen retiró a los 27 hombres para lanzar la inigualable
proeza de Juego Perfecto en Serie Mundial.
En ese choque, que ganó 2-0, Mantle pegó jonrón y apantalló
con notable atrapada. Sal Maglie lanzó gran partido, pero a
Don Larsen nadie le quitaría ese día pasar a la eternidad del
beisbol.
Yanquis y Stengel volverían a ganar en el séptimo decisivo
Genio y figura
En vida se caracterizó por su peculiar forma de ser con sus
actitudes de seriedad/comicidad, lo cual lo describe al paso
del tiempo como un beisbolista fuera de lo común.
Al entrar en los archivos de este deporte encontramos a un
hombre conocido como “El viejo profesor”, quien dentro del
terreno de juego era incomparable, teniendo siempre en su
libro de béisbol sus propias reglas, diferentes a lo que
aprendió en la academia del deporte rey.
Casey Stengel tenía un comportamiento algo cómico dentro
del terreno, pero lo que la gente ignoraba era que detrás de
ese disfraz de payaso se encontraba un intelectual del béisbol
capaz de establecer cualquier récord como dirigente.
Era una especie de bufón de categoría que gustaba ver a
todos sus jugadores felices dentro del diamante y que le
brindaran lo mejor de ellos.
Ese era Casey Stangel. Un genio, un erudito de este deporte
que compareció ante el "Sr. Béisbol" y se ganó de él su
respeto y su individualidad.
Su verdadero nombre
Como algo raro en el béisbol su nombre no era ni siquiera
Casey.
Más bien, el oriundo de Kansas City, se llamaba Charles
Dillon Stengel.
Debido a su éxito como dirigente, la gente olvidó las
habilidades de juego de Stengel, quien sin lugar a dudas se
encontraba en el grupo de los buenos jardineros cuando
jugaba para los Dodgers, Filis, Piratas, Gigantes y Bravos.
Se dice que antes de entrar en el béisbol Stengel era un
dentista en la cuidad donde nació y que siempre comentaba
que “no era muy muy bueno sacando dientes, pero mi madre
adoraba mi trabajo".
En cuanto a las aptitudes cómicas de Casey, éstas se
desarrollaron mucho antes de llegar a las Mayores.
Mientras jugaba para el Montgomery descubrió un pozo en
el medio del jardín. Cuando la atención de los espectadores
estaba sobre otra cosa, rápidamente se metió en él dejando
solamente un pequeño espacio para ver el proceso del
partido.
Cuando la bola fue bateada en esa dirección, Stengel salió
majestuosamente de la profundidad del hueco, dio vueltas
debajo de la bola y la atrapó.
Por supuesto, compadre, hay más en torno a la gran figura de
Stengel.
¡Pero no quiera todo en una vez!
DR. CARLOS RODRÍGUEZ CANDILA:
Hay una frase muy propia de Jorge "Sony " Alarcón: la de
“viscazo”, cuando salía un poderoso batazo de línea sobre
primera base con fuerza ante el bateo de una bola mala que
se convertía en hit.
Tales frases, Jesús, son también propias del béisbol y sería
entrar al arcón de los recuerdos.
El béisbol una fascinación que atrapa al aficionado.
Somete también al aficionado a estar pensando donde y
como debe ser la estrategia, convirtiéndolo según
conocimiento de tal deporte, en un manager más.
Saludos y un gran abrazo como siempre.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.