Mentalidad ganadora
Ricardo Peláez, director deportivo del Cruz Azul, dijo a su llegada a la Máquina que no necesitaban ningún proceso de adaptación y que deseaba conseguir títulos lo más pronto posible. Ayer consiguió el primero.
Que no ganaba como visitante, que aquello de las finales todavía se le complicaba, que nunca un técnico extranjero había hecho campeón al Cruz Azul… los celestes borraron al Monterrey y borraron todos los pretextos, venciendo 2-0 en el Estadio BBVA y quedándose con la Copa MX por cuarta ocasión en su historia.
Los cementeros son campeones de Copa en su versión Apertura 2018, con una autoridad que ahora debe trasladar al torneo liguero.
El mayor mérito de La Máquina fue siempre mostrarse convencida de que podían lograr el primero de los dos títulos en disputa este semestre.
Volvió a ser el equipo agresivo, pero equilibrado que ha trabajado Pedro Caixinha. Cumplieron todos. Desde el portugués, quién aseguró que lucharán por el doblete, hasta Guillermo Allison, criticado por sus fallas en otros partidos pero que este miércoles por la noche tuvo el partido de su carrera.
Ese futbol de orden le abrió el camino del triunfo sobre un Monterrey que suma su tercera derrota en finales en su estadio (dos de Liga y una de Copa).
Elías Hernández rompió con la paridad que se había generado desde el mediocampo a partir de la disputa del balón.
En un servicio de Adrián Aldrete por izquierda, Juan Pablo Carrizo, arquero regio, dejó el balón a la llegada de Elías (33), que conectó con la pierna derecha.
Para amarrar el campeonato de Copa, tuvo que aparecer otra vez Elías, que junto con Alvarado, sirvió a Cauteruccio. El uruguayo empujó el balón y en ese momento quedó claro que no habría poder que le quitará el campeonato.
La Máquina también contó con una dosis de fortuna que siempre la había sido esquiva en este tipo de encuentros definitivos.
Sobre el final del primer lapso, Fernando Guerrero, árbitro central del encuentro que se jugó en la Sultana del Norte, anuló un gol del Monterrey por un fuera de lugar que, aunque apretado, estuvo bien marcado por el abanderado Israel Valenciano Torres.
Los aficionados rayados volvieron a decirle de todo a los árbitros poco después, ya que, aunque en un principio se marcó un pénalti sobre el argentino Rogelio Funes Mori, este quedó invalidado por un fuera de lugar previo, también marcado de forma correcta por Valenciano.
Fiesta azul, de visitante y tanto que le había costado ganar fuera de casa. Alegría para los celestes en patio ajeno y el inicio, según Pedro Caixinha, del camino al doblete para alcanzar esa Liga que tanto se les ha negado en los últimos 21 años.
Por ahora han dejado atrás aquello de no saber ganar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.