LA SEGURIDAD SOCIAL DEL BEISBOLISTA

La seguridad social del beisbolista profesional mexicano. (Serie Cien Años del béisbol en Guanajuato) Por Jorge A. Cervantes Jáuregui. Guanajuato.-

 En el año de 1980, tuvo lugar el movimiento de la ANABE (Asociación Nacional de Beisbolistas) que pretendió el que los peloteros no estuvieran al margen de la ley y se les reconocieran sus derechos laborales. Este es un tema recurrente en la red que parte de la columna “Al Bat” del cronista sonorense Jesús Alberto Rubio, en la que con frecuencia hay aportaciones al respecto siendo preocupación permanente la situación de la protección laboral al beisbolista, y con ello el
reconocimiento a su seguridad social en el retiro. Sin tener quién esto escribe de ninguna manera preparación en el tema, en este siglo XXI donde las leyes laborales han ido en detrimento del trabajador, me pregunto hasta dónde es posible (que debe de haber manera) de encontrar esa fórmula que conduzca a esa protección en éste y en otros deportes profesionales en la nación. La pregunta, es ¿cuál es la fórmula para llevar al cabo la protección de sus derechos a la seguridad social? Obviamente primero los dueños deberán respetar la ley que corresponde. No estoy descubriendo seguramente el hilo negro con tal pregunta, pero posiblemente debe de haber un apartado especial en la ley de seguridad social para este caso, dadas las situaciones tan particulares que tiene la vida profesional del pelotero, futbolista, etc... Es una preocupación de que si algún día, esperemos sea pronto, y si se habla de semanas cotizadas, etc... ¿Cómo traducirlo a un esquema tal que sea suficientemente fuerte de tal manera que pueda dar el pelotero continuidad a sus pagos de cotización que le permitan una pensión? Habría que valorar el trabajo del pelotero de manera permanente y su equivalencia con semanas cotizadas (verano, invierno). Darle valor tal que le convenga y no sea necesariamente equiparable a una valoración semanal a la que normalmente se cotiza. La vida media del pelotero digamos exitoso o constante, tendría que calcularse. Igualmente su permanencia en las lides profesionales, pues hay sucursales, etc... Muchas veces el pelotero al terminar su larga o corta vida profesional, puede dedicarse a otra actividad en la que también puede cotizar, entonces este tiempo laboral en el béisbol, debería de contarle. Se requieren pues desde mi punto de vista, propuestas sólidas y estrategias que conduzcan a que nuestros peloteros tengan algún día un beneficio para ellos y sus familias. A lo mejor modesto, pero seguro. Jesús Alberto precisamente, hace mención a un mensaje enviado por Ramón “Abulón” Hernández, recordado líder de la ANABE y extraordinario pelotero a raíz de la muerte reciente del gran lanzador René Chávez y que fue fiel miembro de dicha asociación y que lucho a pie firme, y que como muchos tuvo una vida difícil al no contar con seguridad social. Además de resaltar sus logros en el deporte, el “Abulón” refiere a la figura de Chávez como el ser humano que fue capaz de sacrificar su carrera deportiva cuando atravesaba su mejor momento para sumarse a una lucha dónde llevó a cabo un activismo muy significativo en favor de la dignificación del beisbolista profesional... “Fue René un luchador incansable en ese aspecto y aún enfermo nos hizo reflexionar que debemos estar preparados para otra situación como la que él padeció para poder actuar en consecuencia, ya que la lucha fue por la dignificación del beisbolista profesional en general...”.