ESTRELLAS DEL BEISBOL

ESTRELLAS DEL BÉISBOL
www.beisboldelosbarrios.com
20,000 VISITAS Y CONTANDO
Por Héctor Barrios Fernández

En esta ocasión me aparto un poco de los habituales temas relacionados 
con las grandes ESTRELLAS DEL BÉISBOL, para agradecer el interés y apoyo 
que le dan a www.beisboldelosbarrios.com sin fines de lucro.
Ya que con ello nos brindan la motivación para seguir adelante.
En algún momento del transcurrir de los tiempos, recibí un correo 
electrónico con un texto muy interesante.

Era del Maestro Alfonso Araujo Bojórquez de quien era y sigo siendo un 
asiduo lector de su diaria columna LANZANDO PARA HOME.
Por la calidad de sus trabajos fue que me convertí en un admirador de 
él.

En el mensaje me informaba que:
“próximamente haré un viaje a la ciudad de Mexicali con la finalidad de 
entregar un trabajo con el que me comprometí.”
También que aprovechando el viaje deseaba extenderlo hasta Ensenada para 
visitar a su hermano radicado en ésta y que para “redondear,” quizá nos 
podríamos reunir en algún lugar, tomarnos un cafecito, conocernos 
personalmente y ¿por qué no? hablar de béisbol.

Como pasaría algunos días con su hermano, le pedí que si tenía, se 
trajera su pasaporte para asistir a uno de los juegos del equipo de la 
vecina San Diego. Llegó el día, me llamó por teléfono y me dijo, “estoy 
en tal y tal calle, frente al consultorio dental de mi hermano.”
En unos minutos pasé por Alfonso, en mi auto, al doblar la calle, vi 
parado en la esquina a un caballero que, me pareció leerle en la frente 
la palabra “BÉISBOL.” Nos dirigimos a casa en donde mi esposa había 
preparado unas ricas botanas y como casi desde niño era un asiduo lector 
de “Hit y Superhit” y otras revistas, todo lo que hice fue recordar algo 
de aquello y pronunciar algunas palabras y frases mágicas y claves como:
“Liga Mexicana, Sonora-Sinaloa, Mexicana del Pacífico, de la Costa, 
Héctor Espino, Ronnie Camacho, Kiko Castro, Vicente Romo, Tigres, 
Ostioneros, Yaquis, Naranjeros, Tomás Morales, Enrique Kerlegand, Arturo 
Carretero, Eduardo Almada, Jesús Alberto Rubio, Dodgers, Yankees, etc., 
para que Alfonso hablara, hablara y hablara, siempre de béisbol y yo 
escuchara, escuchara y escuchara.

En esas horas que parecieron minutos, hice tres cosas, aprender, 
aprender y aprender.
Mi esposa, mis hijos, Alfonso y un servidor, fuimos a San Diego, 
hablamos tanto y tanto de béisbol que, estando en casa, se quedó viendo 
alrededor de la sala y dijo: “Sabes qué Profesor, siento como que si yo 
ya hubiera estado aquí.”
Dejó Ensenada y partió con destino a Monterrey atendiendo una invitación 
del Salón de la Fama del Béisbol Mexicano.
Al despedirnos en el aeropuerto de Tijuana me dijo: “Pues sí que sabes 
bastante de béisbol.”
Viniendo ese comentario de una autoridad en la materia y miembro del 
Salón de la Fama del Béisbol Mexicano y también del Salón de la Fama del 
Béisbol del Caribe, en su calidad de Cronista Deportivo, no resistí la 
tentación de creérmelo. Aunque poco a poco he ido metiendo reversa.
Nos despedimos no sin antes prometer que “algún día” volvería en 
compañía de su esposa Lolita, regresaría por estos lugares a donde había 
pensado no volver jamás.
“Algún día,” se llegó como un mes después, los dos matrimonios 
regresamos a San Diego, nos aventuramos a Anaheim y a Los Angeles para 
ver juegos de Grandes Ligas.
Al siguiente año, volvimos a sentirnos orgullosos y alegres de 
recibirlos de nuevo, regresamos a las mismas ciudades pero, agregamos 
San Francisco y Oakland para ver a sus Gigantes y Atléticos (equipo con 
el que ahora simpatizo) aunque sé que como divulgador de la cultura 
beisbolera que pretendo ser, debo de mantenerme imparcial.
Se fue consolidando una buena amistad que se mantiene hasta el día de 
hoy y que se ha ampliado hasta nuestras familias.
En todo ese tiempo fui testigo de cómo Alfonso Araujo escribía su diaria 
y prestigiada columna “LANZANDO PARA HOME.”
Un día me hizo el comentario:
“Con lo que Usted sabe, también puede escribir.”
Como cosa de coincidencia, por esos días en plática informal con el Sr. 
Rogelio Escobar Zaragoza, cronista de béisbol de toda la vida y que 
también lo fue por algún tiempo del equipo de Ligas Mayores que se 
asienta en la ciudad de San Diego me dijo:
“Profesor, le invito a escribir en la revista de béisbol en donde 
colaboro.”
En un principio me dio temor comprometerme pero acepté el reto y hoy 
suman casi 350 artículos beisboleros que se encuentran en los archivos 
de www.beisboldelosbarrios.com página sin fines de lucro, con el único 
propósito de contribuir a difundir la historia y el gusto por el 
béisbol.
Después de los primeros artículos o remedos de eso, el Ingeniero en 
Computación Francisco Javier Barrios Becerra me comentó a manera de 
propuesta:
“¿Por qué no pone en una página de internet esos trabajos?”
Si la echas a andar, los ponemos, le respondí.
Poco después, así sucedió.
Pensé que una manera de evaluar el trabajo sería contar las visitas a 
www.beisboldelosbarrios.com y hace alrededor de año y medio, nuestro 
hijo le agregó un “contador” a la página que hoy llega a las 20,000 
visitas y contando. Doy gracias a Dios por permitirnos hacer esta tarea, 
a mi esposa María Reyna, a mis hijos Francisco Javier, Donald Oswaldo, a 
mis nietas Emiliana y Greta, al Maestro Araujo, a Rogelio Escobar, al 
Lic. Jesús Alberto Rubio y a tantos que de su talento y calidad he 
tratado de contagiarme, sin olvidarme de agradecer a Ustedes que con su 
interés y apoyo hacen posible que www.beisboldelosbarrios.com sin fines 
de lucro, siga adelante.
“ESTRELLAS DEL BÉISBOL” se publica también en otros sitios que al igual, 
su único propósito es divulgar la cultura del béisbol.
Espero sus amables comentarios en: info@beisboldelosbarrios.com